El constructor diseñó dos sistemas que le permitirán a los conocidos vecinos Graciela Monroi y Oscar Carmona otra manera de manejarse más independiente. Crespi les construyó un dispositivo y un mecanismo para conducir sus vehículos. ESCRIBE MARTIN RODRIGUEZ En su fábrica de la ruta nacional 226, el constructor Tulio Crespi diseñó dos sistemas que le permitirán a personas que sufren diferentes discapacidades otra manera de manejarse más independiente. Los beneficiados en esta ocasión fueron Graciela Monroi y Oscar Carmona, la primera con la colocación de un artefacto que le posibilitará ascender y descender de su automóvil y el segundo con un elemento que le facilitará conducir su rodado. “Hubo que cortar medio auto, le cortamos el piso. La medí a Graciela y no me daba la altura, llegó un momento en que se me habían quemado los papeles. Dije en qué me metí…”, explicó Crespi al medio colega El Diario. El constructor, que asumió el desafío, amplió: “Ya habíamos cortado el auto y Graciela no entraba, íbamos a agrandar la puerta y demás. Fue una chispita, cambié el sistema y salió. Y ahora el auto tiene más bajo el piso y el zocalito con el cual ella puede bajar en cualquier cordón, no tiene que estar bajando ninguna rampa ni nada", señaló Crespi. Seguidamente, manifestó que la sensación que lo embargó al haber creado este dispositivo y constatar luego que el objetivo se había cumplido, fue inclusive superior a lo que experimenta en las competencias automovilísticas. “Esto es como hacer un auto de carrera y que gane, creo que es mejor todavía”, manifestó orgulloso el constructor. “Esto es seguir dándole vida, en cambio la carrera ya pasó y pensás en la otra, en esto no. Ahora me hice gran amigo de ella, y si Dios me trajo al lado de ella, gracias que me está mandando esto", explicó. Por su parte, la ex concejal se mostró notablemente agradecida. “Cuantas veces viajábamos con Irma y yo me tenía que aguantar las ganas de ir al baño, porque era un esfuerzo más para ella. Pero ahora no, me subo y me bajo tan fácil del auto que me parece mentira. La verdad, cuando tuve esta silla sentí que caminaba y ahora con la adaptación del auto sentí que volví a caminar, porque realmente es una independencia total”, mencionó Graciela Monroi. La profesional, aprovechó la ocasión para solicitarles a los gobiernos que legislen para que una persona con discapacidad pueda comprarse un auto de una manera accesible. Y por supuesto agradeció al mentor de esta iniciativa: “Tulio Crespi, dijo que él tiene cabeza para armar estas cosas, pero yo quiero agregar que también tiene corazón. Porque hay que tener corazón para hacer esto”, añadió. Luego habló su amiga Irma, quien es su diaria acompañante y que sabe mejor que nadie los beneficios que traerá este trabajo. “Es una felicidad increíble, no sé como explicarlo. Aparte el agradecimiento a este hombre, porque además de saber y poder”, explicó. Finalmente se expresó Oscar Carmona, quien debido al dispositivo que le ideó Crespi pudo volver a manejar un auto después de muchos años. Al respecto, dijo que “surgió esta posibilidad y bienvenida sea. Porque es una forma más de uno poder manejarse de una forma totalmente independiente. Por eso el agradecimiento para Tulio, porque esto es otra historia y hay que comenzar a desandarla. Todo llega, en la vida tuve momentos muy lindos, otros no tan lindos, pero de eso se trata esta vida y hay que seguir disfrutándola, más con esta posibilidad”, manifestó el conocido músico. Sobre la labor específica del constructor, hizo saber que a su vehículo “se le colocó una palanca con la que frenás, y cuando dejás de frenar la tirás hacia el lado del pecho y hay como un freno de bicicleta que es el acelerador. Y la caja es automática y manejo el volante con la mano izquierda, es muy simple. Acá comienza una forma para que muchos más se puedan independizar”. Tras varios años sin poder hacerlo, paradójicamente por causa de un accidente automovilístico, Oscar Carmona cuenta con esta muy valiosa posibilidad que le permite además poder concurrir a sus shows por sus propios medios. Muy buena iniciativa de Tulio Crespi. Para aplaudir.