El piloto español Fernando Alonso (McLaren) no superó hoy las pruebas médicas que le realizaron por el tremendo accidente que sufrió hace 10 días en el debut de la Fórmula 1 en Australia, y en consecuencia no fue autorizado a correr el Gran Premio de Bahrein del próximo domingo.



Alonso arrastra una fractura en una costilla y un pequeño neumotórax como consecuencia del tremendo accidente que sufrió hace dos semanas en Melbourne, al encimar con su MP4-31 el Haas de Esteban Gutiérrez y salir catapultado cuando circulaba a más de 300 kilómetros por hora, estrellándose contra las barreras. McLaren anunció que el belga Stoffel Vandorne, actual campeón de GP2, será quien se ponga al volante del monoplaza del español en Bahréin.

''Estaba listo para sufrir con el dolor, porque el dolor lo puedes olvidar. Pero los doctores creen que hay un riesgo'', ha explicado en la rueda de prensa oficial de la FIA, donde ha participado con la baja médica ya en el bolsillo. Por ahora seguirá en Bahrein para ayudar a su equipo y a su sustituto, aunque todavía no ha decidido si seguirá la carrera el domingo en directo o se marchará antes.