El piloto neozelandés participó en los ensayos de Barcelona y se mostró conforme con el rendimiento del Toro Rosso. Además espera con ansias el inicio de temporada en Melbourne, Australia.



(DIARIO MOTOR COMPETICIÓN) Brendon Hartley es un hombre novedoso en el paddock. El piloto de Toro Rosso ha sido uno de los cinco pilotos que se han atrevido a salir al Circuit de Barcelona-Catalunya, realizando dos vueltas por la tarde y regresando a boxes para comprobar los datos obtenidos. “Vengo mucho más preparado que cuando  subí en Austin. Los dos meses de descanso son necesarios para recargar energía, me encontraba muy cansado”, declaró el neozelandés.

“El nuevo asfalto estaba más frío y ha impedido calentar bien las gomas, imagino que lo habrán comentado otros pilotos por el pit lane. Hoy hemos simulado una salida, se han hecho pruebas en el volante y hemos compartido datos. El tiempo extra con los ingenieros es excelente, pero la intención inicial era rodar más en el circuito”, ha comentado el campeón del mundo de LMP1, que no se queja del Halo que molestó a su compañero Pierre Gasly “Es difícil entrar y salir del cockpit con el Halo pero merece la pena por la mayor seguridad que aporta”.


Hartley acabó 2017 cansado y está centrado en conseguir buenos resultados con un equipo que conoce y alaba por su buen comportamiento inicial. ” Pasé por la fábrica en diciembre y vi a gente del equipo reservada pero optimista. La asociación con Honda es buena, la fiabilidad es alta y la conducción, aceptable. El objetivo primordial es ser fiables y después exprimir el coche al máximo”, explicó. “No sé cuántos caballos llevo porque no se nota que llevas un sistema híbrido. En Porsche teníamos los frenos en el frontal del coche, aquí toda la potencia va a la parte trasera”.

La primera carrera de 2018 será una especie de carrera de casa para Hartley, que se muestra contento por ser el primer neozelandés en correr un GP de Australia en Fórmula 1. “En mi verano mucha gente me dijo que irían a Melbourne, será la primera vez en mucho tiempo que veré banderas de Nueva Zelanda cuando compito. La otra carrera local será en Mónaco, dónde vivo. Me han dicho que lo pasaré bien en Canadá y en Singapur, ya que los urbanos me gustan”, comentó el ex piloto de Porsche.