El italiano pasó a Lorenzo en la vuelta 16 después de que al español le mostraran un mensaje en su pantalla. Marc Márquez, líder del Mundial, finalizó cuarto en la final.



(AGENCIAS) Marc Márquez no consiguió rematar el primer ‘match-ball’ para cerrar su cuarto título mundial de MotoGP en el Gran Premio de Malasia. Quedó cuarto, y el italiano Andrea Dovizioso hizo los deberes para evitar el desenlace ganando la carrera de Sepang.

La victoria era de Jorge Lorenzo, pero Ducati trabajó en equipo y le brindó los puntos al único piloto que tiene chances de robarle la corona a la Honda número 93. De esta manera, la victoria fue del italiano, seguido de Lorenzo y Johann Zarco.

Lorenzo después dijo que ni leyó el mensaje ni se dejó pasar, pero en su box aplaudieron su profesionalidad por anteponer los intereses del título de su equipo a los de su ansiada primera victoria.

Marc Márquez tuvo un fin de semana difícil. Sabía que la pista de Sepang no le era en absoluto favorable y nunca estuvo en condiciones de plantar cara para ganar. Se conformaba con llegar a un lugar en el podio. Se quedó a un pasito. Un resultado que le mantiene con 21 puntos de confort para resolver el título en Valencia donde se sabe fuerte. Ha pasado página a Sepang y mira con confianza hacia Cheste. "Este resultado no me ha decepcionado en absoluto, al contrario, me ha aliviado" y no perdió la sonrisa.

Así es como llegó la sexta victoria del año para Dovizioso, de nuevo en agua como en Japón, la que le sirve para reducir de 33 a 21 su desventaja en la general respecto a un Márquez que dispondrá en el Ricardo Tormo de su segunda chance de título. Aquella tiene pinta de ser más factible que la perdida hoy en Sepang, pero le tocará cargar con la presión que siempre conlleva conquistar un título en la última carrera del campeonato.