Próximo a culminar la réplica de la Flecha de Plata con la que Juan Manuel Fangio conquistara los campeonatos mundiales de 1954 y 1955, mantuvimos una breve charla con el artista Carlos Regazzoni. En su lugar de trabajo nos comentó que su obra ya está terminada y que ahora realizará la adaptación de la escena a fín de presentarla el 24 de junio en el centenario del nacimiento del quíntuple. INCLUYE  EL AUDIO DE LA NOTA

Desde hace más de un més Carlos Regazzoni convive en las afueras de Balcarce. Allí, justamente en el Cruce de las rutas 226 y 55 trabaja incansablemente junto con un grupo de colaboradores en darle forma un proyecto del cual le encargó el municipio con motivo del centenario del natalicio de Juan Manuel Fangio.



A simple vista la obra conmueve y maravilla en varios aspectos. Desde el concepto en sí, porque la réplica realizada en escala natural está realziada al detalle y con una particularidad: su carrocería está hecha con rastras de discos y otros elementos agrícolas que la gente le ha acercado a modo de donación para realizar la tarea.

El RETEN se acercó hasta el atelier momentáneo del artista Regazzoni, quíen nos atendió amablemente en su casilla rodante. Con un buen vino Malbec de por medio, se inició una linda conversación:


"Estoy terminando la Flecha de Plata Mercedes Benz con la cual Fangio ganó dos campeonatos del mundo, y va a ser un gesto que voy a dejarle a los balcarceños. Es un homenaje a estos 100 años del Chueco Juan Manuel Fangio, el más grande de todos los grandes de todos los tiempos, insuperable." nos comentaba apenas inciada la charla


-¿Cómo ha recibido usted el trato que la gente que lo viene a ver?
-Lo decía yo anoche en un discurso (por viernes 17 de junio) que me hicieron hacer los pibes de Olimpiadas diferenciales. Hicimos un asado anoche como un homenaje a ellos, de la cual vinieron treinta personas. Yo creo que la sociedad de Balcarce, al igual que todas las sociedades, siempre les ha dado un espaldarazo a todos los chicos que tienen problemas. Justamente, yo que recorrí un poco el mundo, hay un lugar en Francia una villa donde los chicos con conductas especiales tienen el máximo apoyo del gobierno, no se escatima nada. Y acá yo veía a la presidente y a los muchachos que sostienen esta organización con dificultades económicas, cobran algún peso para recaudar, para todas las necesidades que tienen no? ¡Qué diferente sería si fuera al revés! Daría humanidad a nuestra sociedad, ocuparse de los hijos y de los especiales por decirlo de alguna manera.

La pasamos muy bien. Yo sorteé hicimos una rifa por uno de los bichitos que yo hago acá con los pedazos de materiales que van sobrando. Muy bien la pasamos, sobre todo con el apoyo incondicional de la familia Crespi. Que siempre está aportando deseos de grandeza para su pueblo. Eso me hizo ser muy amigo de sus hijos y de Tulio, que tiene una empresa ejemplar.

-Es verdad. Tulio Crespi se ha consolidado muy fuerte acá en Balcarce.
-Tulio es un emblema. Yo creo que deberían considerarlo como un emblema. La sociedad balcarceña debe cuidar a Tulio, porque él puede darle mucho trabajo al pueblo.

-Cabe agregar que Crespi es un personaje como pocos. Digamos: solidario y sin pedir nada a cambio.
-Exacto, yo te decía que sus actos hablan por sí solos. Yo me hecho amigo de los hijos: Giuliano, Matiú y Silvia, son todos divinos. El surubí estuvo de rechupete. Estuvieron muchas personas muy cálidas, muy generosas por lo menos conmigo. Esta mañana por ejemplo, no se quien vino y me trajo pastelitos. Siempre es asi, todo el tiempo. Anoche me trajeron tortafritas, se hicieron empanadas fritas, dos collón, dos petit collón, dos cerditos, un cordero, fue una noche inolvidable. Entonces en esas condiciones ¿Quién se va de un lugar? (se ríe).

-Ahora le quería preguntar ¿Usted tuvo la oportunidad de conocerlo personalmente a Juan Manuel Fangio?
-Sí,sí. Fue en tres oportunidades.

- ¿Y qué impresión le dejó?
-No, no, no importa la impresión porque él me haya o nos hayamos encontrado sín saber quien somos. Pero siempre me dio la impresión, que es lo que le digo a la gente que él es un ícono de la era de la máquina y la tecnología en el país, junto a otros como a Jorge Newbery, un Enrique Mosconi, un (Juan Domingo) Perón incluso. Él hizo que la Argentina fuera conocida en un momento crucial y él fue liberado, tomó su estado de libertad con esa máquina que le produjeron las diferentes fábricas que corrían en aquel momento, y siempre me pareció que debería ser un ídolo. Las nuevas generaciones no conocen a Fangio, no saben ni quíen es. En ese aspecto deberíamos hacer algo para valorar esa espiritualidad de ese gran hombre que puede ser un gran ídolo para copiar: su humildad, su talento, su tezón, sus deseos de grandeza, su picardía para lograr objetivos nobles. Realmente fue un gran hombre.

-Me contaba que ya esta terminando la escultura de la Flecha de Plata, ¿En qué porcentaje de trabajo está?
-Te diría que en un 99,2%. Ahora encaré otro proyecto más. Estamos haciendo la Maseratti, y además el proyecto del lugar con un restaurant y una oficina de Turismo, con un montón de cosas, gracias a un intendente genial. Yo digo que Balcarce tiene un intendente genial (José Enrique Etcheverría), es un gran tipo este y Carlos Cortes un gran tipo y es impresionante. Darle bola a un artista no es poco Jah! (se ríe)

-Es algo que es muy difícil de ver hoy en día ¿no?
-(sigue riéndose) Muy difícil!. Yo vengo de experiencias lastimosas con los cerdos de Azul, con los atorrantes de Lamadrid y María Teresa. Miserables, mediocres, trepadores, mentirosos. Pero no te preocupes que ya les viene la mano a ellos, no te preocupes…

LA ÚLTIMA PALABRA.


Foto: Rocio Alvarellos