22 años después, McLaren y Honda vuelven a unir sus caminos para intentar repetir los éxitos que cosecharon en su etapa dorada en la F1. A ellos se les une un Fernando Alonso que quiere ampliar su palmarés y, de paso, quitarse el mal sabor de boca de su etapa en Ferrari. La tarea no será fácil, ya que Mercedes tiene mucha ventaja, pero los números de McLaren y Honda juntos invita al optimismo.

Nadie esta temporada, salvo Daniel Ricciardo de manera puntual, ha podido poner en apuros a la todopoderosa Mercedes, pero la Fórmula 1 puede dar un 'vuelco' a partir del próximo año. No será fácil, ya que la marca alemana lleva una considerable ventaja a sus competidores, pero uno de ellos puede renacer de sus cenizas.


Se trata de McLaren, quien aunque lleva sin ganar desde noviembre de 2012, la llegada de Honda puede suponer un punto de inflexión. Y es que en los años que ambos compitieron juntos, de 1988 a 1992, fueron con contundencia.

McLaren y Honda ganaron cuatro títulos mundiales consecutivos (Senna (1988), Prost (1989), Senna (1990 y 1991), una racha solo comparable con la mejor etapa de Ferrari con Schumacher y la de Red Bull con Vettel.

Cuando sus caminos se separaron (McLaren llevó motores Ford, Peugeot y Mercedes y Honda montó años después su propia escudería) el éxito se esfumó. En el caso de McLaren, la escudería inglesa ganó solo tres campeonatos del mundo más de pilotos y en el del motorista dilapidó muchos cientos de millones de euros para ganar una sola carrera.